Como entrenador/a, ¿obviarías la importancia de conocer los estímulos físicos que hacen subir las pulsaciones? ¿dejarías de tener en cuenta la edad o estilo de vida de tu cliente a la hora de crear su entrenamiento?
Entonces, sabiendo que el estado emocional influye directamente en los cambios fisiológicos, ¿por qué lo sigues obviando?
Tendemos a externalizar servicios sin plantearnos el valor añadido que nos aportaría hacerlo nosotr@s mism@s, y diría más, sin pensar que pueda ser una más de nuestras obligaciones.
Estamos de acuerdo en que no tienes que ser un/a expert@ en inteligencia emocional, que no tienes por qué saber solucionar todos los bloqueos emocionales de tus clientes pero, sin ser médico, tampoco les dejarías desamparados si se lesionaran en uno de tus entrenamientos, ¿verdad?.
Hace ya tiempo que empecé a entender que tod@ entrenador/a debería tener ciertos conocimientos de base para ayudar a sus clientes en un momento de crisis, es lo que yo llamo “primeros auxilios emocionales”.
Y si además de esto, te conviertes en un/a expert@ en acceder a sus emociones, los resultados serán inimaginables.
Puesto que existen tantas excusas como personas, solo te diré que te estamos ofreciendo la llave que abre las puertas de las emociones de tus clientes, que te ofrecemos la posibilidad de que tus clientes quieran estar contigo toda la vida sin necesitarte y de crear un lazo tan fuerte y especial que cada día salgas con energías renovadas de tu trabajo por haber hecho, esta vez sí, todo lo posible por ayudar a quien confía en ti y por ello contrata tus servicios.
Cada día oigo a entrenador@s decir que no se valora su trabajo, que los potenciales clientes no saben, y muchos nunca sabrán los beneficios que tiene el servicio que ofrecen pero lo que no les oigo decir es que a lo mejor no están llegando a ese potencial cliente por falta de habilidades comunicacionales, por falta de herramientas para acceder a sus emociones y saber qué es lo que realmente necesitan. Si no sabes qué necesita tu cliente, nunca sabrás ofrecérselo, irás probando hasta que algo le encaje pero para entonces, puede que sea tarde.
Darle la espalda a una necesidad tan evidente como ésta, sólo va a hacer que vayas a la zaga cuando tu competencia incorpore estos recursos.
¿Pioner@ o seguidor/a? Tú decides en qué extremo de la cuerda estás.
Amaia González.
Coach con PNL.
amaia@coachingdelmarketing.com
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